Integridad y liderazgo

Integridad y liderazgo van de la mano cuando se trabajo desde el propósito esencial.

La integridad consiste en encontrar un eje de coherencia, un puente, entre el pensar, el sentir y el actuar.

Los líderes íntegros poseen mucha mayor capacidad para desarrollar sus proyectos, ya que estos se encuentran apoyados desde los tres ámbitos que ante se han presentado.

El líder íntegro piensa

El pensar les permite analizar lo que se encuentran a su alrededor, pudiendo poner en juego todas las inteligencias.

El líder íntegro actúa

Un líder íntegro buscará la motivación para sus acciones en las intenciones más elevadas. Sus ideales prevalecerán y las necesidades se basarán en lo propio y en lo colectivo.

Pero no es un teórico ni un divagador, porque su voluntad desemboca en acciones concretas y que tratan de mejorar el mundo.

El líder íntegro siente

La mejor manera de poder armonizar lo que se piensa con lo que se hace es mediante los sentimientos. Son un verdadero termómetro para poder medir la coherencia y lo adecuado de una idea llevada a la acción.

A lo largo de la historia hemos visto ejemplos desgraciados en los que una persona o un colectivo llevaba a cabo aquello que había planificado sin filtrarlo por el sentimiento De esa manera se han llevado a cabo guerras, genocidios, actos terroristas, etc. En los que se habían diseñado de manera cuidadosa y se llevaron a cabo según lo planificado, pero dejando fuera lo emocional.

La integridad también es armonía

Una persona íntegra también debe ser una persona equiibrada.

Si domina la voluntad se convertirá en una persona voluntarista que tratará de llevar a su equipo a la acción continua, pero no planificada y no efectivo.

Si lo que prepondera es el sentir puede ocurrir que las emociones le arrebaten y llevarle hasta el sentimentalismo.

Si la referencia es la inteligencia puede convertirse en una persona fría y calculadora, distante.

Cuidado con el carisma

También se debe tener cuidado con los líderes muy carismáticos, aquellos que pueden dirigir desde su atractivo personal. Que pueden conseguir adhesiones muy férreas, pero que hacen que su equipo no crezca alrededor de ellos.

Trabajar con Viento a Favor

Trabajar con Viento a Favor el propósito esencial te permite encontrar tu eje de coherencia y convertirte en un líder íntegro, además de un líder trascendente.